Monday, June 9, 2014

Pensando estaba yo...

En Cuba por mucha pobreza que haya en cada familia, a la mayoría nos crían "a toda leche" y no me refiero solamente a darnos todo lo que pueden, incluyendo el ultimo poquito que "hay que guardarle al niño", sino hablo de esa devoción y cariño que te da toda la familia de gratis cuando te tiene cerca y la sensación de que solo te tienes a ti mismo es muy remota casi nula ( habrán casos específicos, lo se) Pero hasta en la calle cuando te rodean los desconocidos y estás en dificultades, no tienes ni que pensar, ni añorar, ni esperarlo, una mano siempre aparece, un ojo amigo siempre esta mirando, un confianzudo quiere hasta cargarte a ti si lo dejas. La necesidad social no es de contacto sino de privacidad y un poco de espacio aveces. Pero a nosotros nos gusta vivir amontonados y no avisar antes de una visita.
Luego te vas a un país como este en el que la posibilidad de que te ayuden a subir la maleta de 130 libras en una guagua es tan remota que te vez con una desolación extraña mirando con timidez y espanto, a cada transeúnte que te pasa por al lado con audífonos que funcionan hasta mejor que las gafas oscuras, con la mirada glossy esperando su proxima cancion e ignorante de tu desespero. Aprendes de la manera mas dura que estas "on your own" y se hace mas dura porque te compadeces de ti mismo. Luego de tiempo de sentirte como si te faltara un miembro, abrumado por la lastima que tu mismo te tienes un día descubres que eres perfectamente capaz y que a la hora de los mameyes como decimos, ni la mas remota duda te pasa por la cabeza de que no importa que necesites hacer encontraras la forma de darle la vuelta y hacerlo por ti mismo, comienzas tu también a ignorar a los transeúntes y a llevar audífonos, entonces te confundes con la masa, y la lastima se transforma en experiencia, el dolor y la soledad se convierten en orgullo del sano, del bueno, en el descubrimiento de que aveces delegamos demasiado en otros y no hay nada triste en pagar tu propia cuenta. Este es un país que necesita el contacto humano, la violación de los espacios, donde mas de dos en un elevador es demasiado, pero sin embargo leo carteles en el metro que hablan de enterrar tus ojos en un anuncio si no quieres hacer contacto visual con alguien. Conozco personas con que comparto charlas cada semana desde hace casi dos años y todavía temen establecer contacto mas profundo que ese. Es todo una ironía y al final de esta historia no recuerdo si tenia un punto... Simplemente pensaba.

No comments:

Post a Comment